Opiniones de usuarios y asociaciones de consumidores sobre los mejores tipos de sartenes que puedes comprar en México
Hay diferentes tipos de materiales que se usan para fabricar las sartenes, cada uno con sus ventajas y desventajas. Algunos de los más comunes son el aluminio, el acero inoxidable, el hierro fundido, el teflón y la cerámica.
El material ideal depende del uso que le vayas a dar a la sartén y de tus preferencias personales. Por ejemplo, si buscas una sartén económica, ligera y fácil de limpiar, el aluminio con recubrimiento antiadherente puede ser una buena opción.
Si buscas una sartén resistente, duradera y que no libere sustancias tóxicas, el acero inoxidable puede ser una buena opción. Si buscas una sartén que transmita el calor de forma uniforme y que cree una capa natural antiadherente, el hierro fundido puede ser una buena opción. Si buscas una sartén que tenga propiedades antibacterianas y que no se raye ni se agriete, la cerámica puede ser una buena opción.
El tamaño de la sartén depende del número de personas para las que se va a cocinar y del tipo de alimento que se va a preparar. Lo más habitual es tener varias sartenes de diferentes tamaños para adaptarse a cada ocasión. Los tamaños más comunes son:
El tamaño ideal depende del número de personas para las que vayas a cocinar y del tipo de alimento que vayas a preparar. Por ejemplo, si buscas una sartén para freír huevos, tortillas o salchichas, un tamaño pequeño de 18 cm puede ser suficiente.
Si buscas una sartén para freír filetes, pescados o verduras, un tamaño intermedio de 20 cm puede ser adecuado. Si buscas una sartén para freír pollo, carne o paella, un tamaño grande de 24 cm o más puede ser necesario.
El mango de la sartén debe ser cómodo, ergonómico y resistente al calor. También debe estar bien fijado al cuerpo de la sartén para evitar accidentes. Algunas sartenes tienen mangos desmontables que facilitan su almacenamiento y limpieza.
El mango ideal depende de la comodidad, la ergonomía y la resistencia al calor que busques. Por ejemplo, si buscas un mango cómodo y seguro para no quemarte, el de baquelita o cualquier otro material plástico resistente al calor puede ser una buena opción.
Si buscas un mango ergonómico y que te permita controlar mejor el movimiento de la sartén, el de acero inoxidable con agarre frío puede ser una buena opción. Si buscas un mango resistente y que te permita llevar la sartén al horno, el de hierro fundido con funda de silicona puede ser una buena opción.
La forma de la sartén influye en la distribución del calor y en la facilidad para darle la vuelta a los alimentos. Las sartenes pueden ser redondas, cuadradas o rectangulares. Las redondas son las más comunes y versátiles, las cuadradas aprovechan mejor el espacio y las rectangulares son ideales para asar pescados o carnes.
La forma ideal depende de la distribución del calor y de la facilidad para darle la vuelta a los alimentos que busques. Por ejemplo, si buscas una forma que distribuya el calor de forma uniforme y que te permita darle la vuelta a los alimentos con facilidad, la redonda puede ser una buena opción.
Si buscas una forma que aproveche mejor el espacio y que te permita cocinar más cantidad de alimentos a la vez, la cuadrada puede ser una buena opción. Si buscas una forma que sea ideal para asar pescados o carnes enteras, la rectangular puede ser una buena opción.
No todas las sartenes son aptas para todos los tipos de fuego, como el gas, la electricidad, la inducción o el horno. Debes verificar que la sartén que elijas sea compatible con el tipo de fuego que tienes o que vayas a usar. Por ejemplo, las sartenes de inducción deben tener un fondo magnético para que funcionen correctamente.
Es importante que la sartén que compres tenga una garantía que cubra posibles defectos de fabricación o de funcionamiento. También es conveniente que la marca o la tienda donde la compres ofrezca un buen servicio postventa en caso de que necesites hacer una devolución, un cambio o una reparación.
Los precios de los diferentes tipos de sartenes que se pueden encontrar en México varían según la marca, el modelo, el material y las prestaciones.
Estos son algunos ejemplos de precios aproximados de cada tipo de sartén:
Estas son algunas de las preguntas frecuentes que tienen los usuarios antes de comprar una sartén en México y sus respectivas respuestas:
Para el fuego de gas, se pueden usar casi todos los tipos de sartén, siempre que tengan un fondo grueso y resistente que distribuya el calor de forma uniforme y evite que se queme la comida.
Para el fuego eléctrico, se recomiendan los sartenes de acero inoxidable, hierro fundido o cerámica, que tengan un fondo plano y liso que haga buen contacto con la superficie de la placa y que no se deforme con el calor.
Para el fuego de inducción, se requieren los sartenes que tengan un fondo magnético, como los de acero inoxidable o hierro fundido, que sean detectados por el campo electromagnético que genera la placa y que calienten por efecto Joule.
Para el horno, se aconsejan los sartenes que tengan un mango resistente al calor, como los de acero inoxidable o hierro fundido, que no se derrita ni se queme con las altas temperaturas y que no tenga partes plásticas o de silicona.
El tipo de sartén más saludable depende del material con el que esté fabricado y del uso que se le dé. En general, se consideran más saludables los sartenes que no liberan sustancias tóxicas ni alteran el sabor o el valor nutricional de los alimentos. Algunos ejemplos son los sartenes de acero inoxidable, hierro fundido o cerámica, que son naturales, higiénicos y duraderos.Sin embargo, también hay que tener en cuenta la cantidad y el tipo de aceite que se usa para cocinar, así como la temperatura y el tiempo de cocción.
La forma de limpiar y cuidar un sartén depende del material con el que esté fabricado y del recubrimiento antiadherente que tenga. En general, se recomienda lavar el sartén después de cada uso con agua tibia y jabón neutro, usando una esponja suave o un paño húmedo.
Se debe evitar usar estropajos metálicos, detergentes abrasivos o lavavajillas automáticos, que pueden rayar o deteriorar el recubrimiento antiadherente. También se debe secar bien el sartén antes de guardarlo y evitar apilarlo con otros utensilios que puedan dañarlo.
El proceso de curar o sazonar un sartén consiste en crear una capa protectora y antiadherente sobre la superficie del mismo, usando aceite vegetal o grasa animal. Este proceso es especialmente necesario para los sartenes de hierro fundido, pero también se puede aplicar a otros tipos de sartén. Los pasos a seguir son los siguientes:
Para evitar que se pegue la comida en el sartén, se pueden seguir algunos consejos como:
El tipo de utensilios que se pueden usar con un sartén depende del material con el que esté fabricado y del recubrimiento antiadherente que tenga. En general, se recomienda usar utensilios de madera, silicona o plástico resistente al calor, que no rayen ni dañen la superficie del sartén.
Se debe evitar usar utensilios metálicos, como cuchillos, tenedores o espátulas, que pueden rayar o deteriorar el recubrimiento antiadherente. También se debe evitar usar utensilios que puedan derretirse o quemarse con el calor, como los de plástico o goma.
El tipo de aceite que se debe usar con un sartén depende del tipo de alimento que se vaya a cocinar y del punto de humo que tenga el aceite. El punto de humo es la temperatura a la que el aceite empieza a descomponerse y a liberar humo y sustancias tóxicas.
Se debe elegir un aceite que tenga un punto de humo alto, que resista las altas temperaturas y que no altere el sabor ni el valor nutricional de los alimentos. Algunos ejemplos son el aceite de girasol, el aceite de canola, el aceite de maíz o el aceite de oliva refinado .
Para saber si un sartén está en buen estado, se pueden observar algunos aspectos como: