Nos agradó mucho la facilidad de desembalar, leer la guía de inicio rápido y comenzar a limpiar. Lo sencillo que fue cambiar entre las diferentes formas de pulverización y presiones para obtener el mejor método para cada tarea. Usamos el limpiador para el porche de cemento, la acera, sillas de césped, una mesa al aire libre y una parrilla. El cable de alimentación es muy extenso y la presión se sintió muy bien. Desafortunadamente, la parrilla no se limpió del todo bien, pero eso puede deberse a que no usamos agua caliente ni productos químicos. Las sillas y la mesa se dejaron impecables. La acera y el porche salieron bien excepto por algunas manchas de óxido bajo la puerta de hierro forjado y una de aceite. Estamos satisfechos con el resultado.